Escrito por: Mariel Hernández Maldonado
Las nuevas tecnologías nos han dado la oportunidad de tener una mirada más íntima a la vida diaria de cientos de miles de personas al rededor del mundo, lo cual ha develado todo tipo de prácticas, usos y costumbres; desde la vida diaria de los vendedores ambulantes de Mumbai hasta los abusos policíacos cotidianos que llegan a darse al rededor de todos los países del mundo. Sin embargo muchas de estas grabaciones se pierden cuando el dispositivo con el que se graban es robado o destruido, perdiendo horas y horas de material fílmico muy valioso.
Desdichadamente gran parte de los videos caseros que se graban en Estados Unidos tienen que ver con abusos policiales; tan solo en lo que va del año se han registrado 11 casos de brutalidad policíaca en video; algunos de ellos terminando en la muerte de la víctima; en algunos de estos casos el video ha sido determinante para la resolución del juez, dándole un lugar primordial a los videos. Sin embargo a raíz de esta nueva racha de ciudadanos alerta muchos elementos policíacos destruyen la evidencia para hacer imposible un fallo en su contra.
Una nueva aplicación hace posible que los abusos que se graban puedan ser subidos a Internet en el mismo momento en que suceden para evitar falta de pruebas y poder castigar correctamente a quien incurre en falta, se llama Mobile Justice CA y le permite al usuario grabar un video y subirlo inmediatamente después para mandarlo a la oficina de agentes más cercana a donde esté ocurriendo la violación a los derechos humanos.
Esta app disponible para Android e iOs surgió de la preocupación de los habitantes por la elevada cantidad de abusos policíacos a los habitantes de ciertos estados como California, en donde se han dado la mayor cantidad de asesinatos por abuso del poder. Fue la Unión Americana de Libertades Civies (ACLU) quien dio a conocer esta nueva aplicación gratuita esperando reducir de esta manera la inseguridad general que se siente en Estados Unidos hacia los policías y principalmente para protegerse entre ellos.
Hector Villagra, director de ACLU al sur de California expresó la preocupación que existe por el carácter racista que caracterizan los ataques policiales, pues en su mayoría las agresiones son contra ciudadanos afroamericanos o latinos que sin cometer un crimen real son sometidos a todo el poder de la ley.